Estos siete consejos sobre el orden de Marie Kondo te ayudarán a organizar tu mudanza y no perder los nervios. ¡Planifica y todo irá como la seda!

Una mudanza es algo que suele generar mucho estrés si no se planifica correctamente. El tiempo se nos echa encima y, luego, todo son prisas. Y es que, aunque cambiar de casa sea emocionante, también implica un duro trabajo de limpieza, orden, embalaje y transporte de todas nuestras pertenencias.

Para Marie Kondo la clave es poner orden en nuestra casa actual para preparar una mudanza mucho más llevadera. La japonesa, conocida por su famoso libro La Magia del orden, nos da varios trucos para conseguir organizar correctamente una mudanza. ¡Toma nota!

Antes de ponerte con la mudanza, debes tener claro qué necesitarás para transportar tus pertenencias. Localiza cajas de cartón, si puede ser, de distintos tamaños. Se aconseja no usar cajas demasiado grandes, ya que, si pesan demasiado, será más difícil transportarlas. También, necesitarás cinta adhesiva, plástico de burbujas, rotuladores para etiquetas, papel de embalar…

Para Marie Kondo, el objetivo de ordenar no es más que vivir con los artículos que amas. Teniendo en cuenta esta máxima, intenta tener una visión clara del espacio con el que cuentas en tu nueva vivienda, lo que te ayudará a la hora de tomar decisiones sobre lo que vas a conservar o no.

Según la gurú del orden, es muy importante que, antes de mudarte, visualices cómo será tu vida en tu nuevo hogar y lo hagas pensando en lo que te gustaría tener en él. Muebles, cuadros, decoración… Para Marie Kondo, visualizarse en el nuevo hogar te hace sentir la conexión que necesitas con tu nueva vivienda, incluso antes de la mudanza.

Como hemos comentado, la planificación es clave para que tu mudanza salga redonda. No es buena idea ponerte a llenar cajas de forma descontrolada. Por esa razón, una buena práctica es crear una lista con lo que, a priori, piensas que será imprescindible para ti y clasifícalas por estancias.

Para la japonesa, guardar los objetos por categorías es crucial: ropa, libros, documentos, objetos personales, decoración… De esta forma, podrás comprobar qué elementos usas y cuáles no, cuáles quieres conservar sí o sí porque te provocan alegría y de cuáles prefieres deshacerte para que no sigan «cogiendo polvo».

Lo ideal es contar con varias cajas y de varios tamaños, para ir acumulando los distintos objetos. Es una mala idea para la japonesa Marie Kondo empaquetar objetos de diferentes categorías en una caja grande. Si todo lo guardas en cajas por subcategorías, podrás aprovechar mucho mejor el espacio y no quedará todo «perdido» en una caja enorme. A la hora de colocarlos en tu nuevo hogar, también te será más fácil si ya están previamente organizados.

¡Y recuerda etiquetar las cajas! Te será mucho más útil y no tendrás que abrirlas una por una para saber qué hay dentro.

Este truco no es propio de Marie Kondo, sin embargo, pensamos que es una buena recomendación. Es muy útil reunir lo básico en una caja para los primeros días, así, podrás adecuar el ritmo de la mudanza y no tener que abrir todas las cajas para encontrar tus objetos de uso diario como, por ejemplo, un par de sartenes, una toalla, platos y vasos, el pijama, el neceser y una muda de ropa.

Cuando tengas tiempo y de forma organizada y ordenada, podrás ir colocando todos tus objetos en tu nuevo hogar. ¡De esta forma te olvidas de buscar como loco en qué caja guardaste el cepillo de dientes!

Marie Kondo explica la importancia de dar las gracias a tu casa por la protección que te ha brindado mientras has vivido en ella. Camina por sus estancias y despídete. También, puedes quemar incienso para limpiar el espacio y preparalo para sus próximos habitantes, tal y como haría Kondo.

Cuando la japonesa llega a una nueva vivienda, acostumbra a saludarla, una costumbre basada en el protocolo al entrar a los santuarios japoneses. Además, ella aconseja no apresurarnos a la hora de amueblar o decorar nuestro nuevo hogar. Ella recomienda vivir durante unas semanas para aprender qué necesitaremos para sentirnos bien, antes de llenarlo con artículos que pensamos que serán imprescindibles. Según Marie Kondo, «tu casa te dirá qué necesitas y dónde colocarlo».